México y Rusia fortalecerán sus relaciones económicas durante el Gobierno del mexicano Andrés Manuel López Obrador, quien invitó al presidente ruso Vladímir Putin a su toma de posesión, dijo este martes a Sputnik el portavoz de la embajada rusa Eugenio Nenashkin.
La invitación formal se realizó en el marco de una reunión el lunes entre el próximo jefe de Estado y el embajador de Rusia, Víctor Koronelli, celebrada en la sede del equipo de transición presidencial, a la cual también asistió el futuro canciller mexicano, Marcelo Ebrard.
Durante el encuentro, López Obrador extendió una invitación al presidente Putin, «para asistir a la ceremonia de inauguración el 1 de diciembre de este año», cuando comenzará el mandato presidencial 2018-2024, dijo el portavoz diplomático.
Las delegaciones también discutieron acerca de «la reanudación del funcionamiento del mecanismo de la Comisión Mixta para la cooperación económica, comercial, científica y técnica, y de navegación marítima, y discutieron el fortalecimiento de la presencia económica de Rusia en México», apuntó Nenashkin.
Este martes, un asesor del presidente ruso en asuntos internacionales, Yuri Ushakov, no descartó una reunión entre los presidentes Putin y López Obrador, en el marco de la cumbre del G20 a fines de noviembre en Argentina, o durante una visita del líder ruso a México.
«Hay opciones a considerar: un vuelo a México o un encuentro en Argentina», dijo el asesor presidencial ruso sobres las alternativas que examina el Kremlin tras conocer la invitación formal.
HACIA LA ABOLICIÓN DE VISAS
En la reunión se abordaron otros asuntos de las relaciones bilaterales, algunos de ellos vinculados a la base jurídica de las relaciones diplomáticas.
«La parte mexicana, en particular, expresó su disposición a dar prioridad a la pronta finalización de los preparativos para un acuerdo de formato completo sobre la abolición del régimen de visados para los ciudadanos de Rusia y México», dijo el portavoz diplomático.
Las partes también trataron asuntos de intereses comerciales y los esfuerzos para incrementar el flujo de visitantes rusos a zonas turísticas mexicanas, como la Riviera Maya sobre el mar Caribe.
Por su parte, Ebrard señaló que ambos países trabajarán a partir de dos mecanismos de cooperación ya existentes, además de la Comisión Mixta mencionada por la parte rusa, el Mecanismo de Consultas Políticas México-Rusia de alto nivel.
El futuro canciller explicó que el presidente electo mexicano y el embajador Koronelli «conversaron sobre el interés en el creciente flujo de turistas rusos hacia México, especialmente en los últimos años».
En cuanto a la abolición de visas, apuntó que el visado «ya no es necesario a nivel diplomático, pero se trabajará para que este beneficio alcance al resto de ciudadanos» de ambos países.
En cuanto a las próximas inversiones rusas en México, mencionó especialmente en el sector automotriz.
El embajador Koronelli visitará próximamente la ciudad de Monterrey «para la inauguración de una empresa distribuidora de vehículos rusos», informó la oficina de Ebrard en un comunicado sobre la reunión.
El intercambio comercial de México y Rusia se incrementó hasta los 2.000 millones de dólares anuales en 2016, y los gobiernos de ambos países buscan duplicar esa cifra, según han expresado en otras ocasiones sus respectivas embajadas.
En materia energética, la compañía petrolera rusa Lukoil ha ganado varios contratos para exploración y extracción de hidrocarburos en yacimiento del Golfo de México, en las licitaciones que comenzaron en el verano de 2015 tras la apertura de ese sector a las inversiones extranjeras y privadas.
En materia aeronáutica, la línea aérea mexicana Interjet es el mayor cliente extranjero de los aviones rusos Sukhoi Superjet 100 (SSJ100) desde que, en el año 2013, incorporó 14 unidades de fabricación rusa, con planes de expansión de sus compras de aeronaves.
Rusia es el primer socio comercial de México entre los países de Europa que no forman parte de la Unión Europea, y el número 29 en el plano mundial.
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