Asilo en Argentina permite reuniones diarias con dirigentes bolivianos, dice Evo Morales
El derrocado presidente de Bolivia, Evo Morales (2006-2019), comentó el lunes durante una entrevista exclusiva con Sputnik, que decidió refugiarse en Argentina por la proximidad entre ambas naciones, lo que le permite mantener reuniones diarias con dirigentes políticos de su país e incluso recibir visitas familiares.
“Recibo casi cada día visitas que vienen de Bolivia, mis compañeros, mis autoridades, e incluso mis familiares; ésa es la ventaja fundamental que tengo en Argentina”, dijo el exjefe de Estado desde Buenos Aires, donde se encuentra asilado desde el 12 de este mes.
Morales dijo que mientras dure su estadía en el país, espera poder “seguir coordinando” con movimientos sociales y autoridades, de cara a la campaña para las elecciones presidenciales del próximo año.
El Tribunal Electoral de Bolivia tiene plazo hasta el 2 de enero para emitir la convocatoria a las elecciones en las que Morales no podrá ser candidato, según el acuerdo político entre el Gobierno de facto y la mayoría del Movimiento al Socialismo (MAS), que controla el parlamento.
Se estima que los comicios que pondrán fin a la crisis política en Bolivia se realizarán en el primer semestre de 2020, aunque todavía no hay una fecha precisa para la convocatoria electoral.
El exmandatario boliviano reconoció que también la seguridad fue un factor a tener en cuenta para elegir refugiarse en Argentina.
“El nuevo Gobierno, con el nuevo presidente, el hermano Alberto Fernández, nos garantiza también seguridad, por eso estamos acá”, manifestó Morales, quien de todas formas destacó que en México, país al que viajó tras el golpe de Estado, “también tenía seguridad como asilado”.
A la espera de que el Ejecutivo argentino confirme su estatus de refugiado, el derrocado presidente de Bolivia confirmó que entró como asilado y pidió “tramitar el refugio” por recomendación tanto de sus “compañeros bolivianos como de Argentina”.
“Está todo en trámite y garantizado, tengo todas las garantías correspondientes”, confió.
El gobernador de la provincia argentina de Jujuy (fronteriza con Bolivia), Gerado Morales, anunció que el exmandatario estaba invitado a visitar esa jurisdicción, pero el expresidente indicó que ni se había enterado por los medios de comunicación ni le había llegado una invitación oficial.
En caso de recibirla, quien gobernó Bolivia desde 2006, reconoció que debe consultar primero con las autoridades del Gobierno argentino cualquier traslado.
“Tengo que preguntar al Gobierno nacional si me recomiendan ir; en todo caso, toda invitación será siempre bienvenida”, afirmó.
Bolivia está inmersa en una crisis política desde el pasado 10 de noviembre, cuando Morales renunció a su cargo presionado por la cúpula de las Fuerzas Armadas y la policía y luego de varias semanas de protestas de grupos de la oposición por un presunto fraude electoral en los comicios del 20 de octubre.
Después de que el mandatario abandonara su país, la senadora opositora Jeanine Áñez se autoproclamó presidenta sin pasar por los procedimientos legislativos previstos en unas sesiones del Parlamento que no tuvieron el quórum requerido.
La fiscalía de la ciudad de La Paz ordenó recientemente detener al líder indígena para que responda por acusaciones de sedición, terrorismo y financiamiento al terrorismo.
La orden de los fiscales, que investigan la presunta responsabilidad de Morales en bloqueos de carreteras que siguieron al golpe de Estado de noviembre, implica que el expresidente será detenido si intenta ingresar a Bolivia.
La Comisión Nacional para los Refugiados de Argentina trabaja en estos días para conceder el estatus definitivo de refugiado al expresidente boliviano y otra veintena de funcionarios de su Gobierno que se encuentran asilados en el país.
Sputnik