“Los nicaragüenses quieren vivir en paz y tranquilidad y tener mejores oportunidades para sus familias y han dado su voto mayoritario al proyecto del FSLN”, aseguró a la Agencia Sputnik el diputado sandinista Adolfo Pastrán, tras el primer informe preliminar del Consejo Nacional Electoral (CNE) ).

La Alianza Unida Nicaragua Triunfa, encabezada por el FSLN, partía como favorita para imponerse en las urnas ante cinco partidos que participó en la contienda, cuestionada por colectivos opositores y organismos internacionales por la ausencia de rivales de peso, muchos de los cuales son procesados ​​​​por delitos contra el estado.

Según el informe leído en rueda de prensa por la presidenta del Consejo Supremo Electoral de Nicaragua, Brenda Rocha, el oficialismo también ganó las 17 cabeceras departamentales.

El CNE tenía casi 3.7 millones de ciudadanos empadronados para elegir a alcaldes, vicealcaldes y concejales de los 153 municipios de Nicaragua para lo cual fueron habilitadas 7.931 juntas receptoras de voto, repartidos en 3.106 colegios electorales.

Además del oficialismo, en estos cómicos participaron los opositores Partidos Liberal Constitucionalista (PLC, derecha), Yapti Tasba Masraka Nanih Aslatakanka (Yatama, organización indígena de la Costa Caribe), Partido Liberal Independiente, Alianza por la República y la Alianza Liberal Nicaragüense.

La jornada electoral transcurrió sin el monitoreo de observadores internacionales, quienes fueron suplidos por un equipo del Consejo Nacional de Universidades, enter rector de la educación superior en Nicaragua, a cargo del llamado acompañante electoral.

En los comicios locales de 2017 el FSLN ganó 135 alcaldías, el PLC precisó 11, mientras que el opositor Ciudadanos por la Libertad (CxL, derecha) se quedó con cinco, pero en agosto de 2021 la Corte Suprema de Justicia canceló su personalidad jurídica, impidiéndole contendiente en eventos electorales. 

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