Era inevitable que el dinero para Ucrania se convirtiera en un tema tóxico en EEUU, declaró el vicepresidente del Consejo de Seguridad de Rusia, Dmitri Medvédev. Agregó que así son las leyes del género político.

“El tema del dinero para Ucrania se está volviendo tóxico en EEUU. Los congresistas exigen auditorías totales sobre el destino de la gigantesca cantidad de dinero. Y a dónde irán a parar las nuevas decenas de miles de millones solicitadas por el viejo y extraño Biden, al que llamaron acertadamente vicepresidente de Ucrania en el Capitolio. Era inevitable, es la ley del género político”, escribió el político ruso en su cuenta de Telegram.

Agregó que ahora que los republicanos están más fuertes después de las elecciones, arremeten contra los demócratas, que a su vez intentan defenderse. A pesar de ello, dijo que Washington seguirá destinando grandes sumas de dinero a la militarización del régimen de Kiev, independientemente de quién sea más fuerte ahora: los demócratas o los republicanos.

“Esto forma parte del consenso rusófobo de la clase política estadounidense. Lo importante es otra cosa. Cada vez será más difícil hacerlo”, señaló Medvédev.

El estado de ánimo entre los estadounidenses de a pie empezará a girar gradualmente hacia la realidad, y verán que se les ha vuelto a engañar, explicó. Verán que en un periodo de recesión económica y de aumento de los precios en todo se han desviado enormes cantidades de dinero del presupuesto estadounidense.

“En interés del complejo militar-industrial y de la familia Biden, cuyo ego quedó herido en Ucrania. En interés de los ladrones comunes, tanto en Estados Unidos como en todo el mundo, ganando dinero a costa de los males ajenos”, se lee en la publicación de Medvédev.

Y esto, según el político ruso, seguirá acumulándose “hasta que el Congreso deje de apoyar incondicionalmente al régimen ultranacionalista de Ucrania”.

Por todas estas razones, Medvédev predice que no habrá nada bueno para el régimen de Kiev, puesto que Washington tiene un historial de traicionar a sus aliados, y tarde o temprano lo mismo ocurrirá con Ucrania.

Sputnik