Cientos de miles de trabajadores secundan una huelga masiva en Reino Unido para reclamar mejoras salariales
Medio millón de trabajadores secundan una de las huelgas con más paro en una década.
23.000 colegios permanecerán cerrados y 100.000 funcionarios no trabajarán durante el día de hoy.
Cientos de miles de trabajadores en el Reino Unido, entre ellos maestros, personal universitario, funcionarios y conductores de trenes y de autobuses se han declarado en huelga este miércoles como reclamo de mejoras salariales al gobierno británico. Aunque el país ha vivido varias jornadas de paros en los últimos meses, la de este miércoles es la más importante por el número de empleados que la secundan y la variedad de sectores que la apoyan. A esta jornada de protestas también están llamados medio millón de funcionarios.
El Gobierno conservador de Rishi Sunak ha reconocido que habrá problemas debido al alcance de las medidas de fuerza, ya que miembros de siete sindicatos han votado a favor de ir a la huelga.
Piquetes y miles de escuelas cerradas
Miles de escuelas se han visto obligadas a cerrar este miércoles por falta de personal, lo que ha creado dificultades para muchos padres, obligados a tomarse el día libre o teletrabajar.
Desde esta mañana, se han montado piquetes fuera de estaciones de trenes, escuelas primarias y secundarias, departamentos gubernamentales y universidades de todo el país.
En la jornada de este miércoles, unos 23.000 colegios han resultado afectados por el paro, en tanto que 100.000 funcionarios de 124 departamentos del Gobierno tampoco trabajarán.
Los conductores de tren de 14 operadores vuelven hoy al paro, después de que secundasen medidas similares en los últimos meses.
Asimismo, la Confederación sindical ha informado de que entregarán al Gobierno una carta firmada por 200.000 miembros en protesta por un nuevo proyecto de ley, actualmente en trámite parlamentario, que busca fijar unos niveles mínimos de servicios durante las huelgas.
El secretario general de TUC, Paul Nowak, dijo que espera que las protestas y huelgas envíen un fuerte mensaje al Gobierno sobre el enfado que siente un número creciente de trabajadores.
RTVE