Los Tomahawk modificados: ¿qué significa su compra para Japón y para la región?
Los misiles Tomahawk que Japón planea comprar a EEUU serán de la última modificación, declaró Fumio Kishida, primer ministro japonés. En una entrevista con Sputnik, Yuri Knútov, director del Museo de Defensa Aérea, compartió más detalles sobre las nuevas características de los vehículos y comentó si pueden mejorar la capacidad defensiva de Japón.
Los misiles de crucero Tomahawk son conocidos por su uso en la guerra del Golfo de 1991 y en la guerra de Irak de 2003. La nueva modificación los hizo mucho más inteligentes. En particular, el experto militar explicó que el nuevo Tomahawk tiene tres grados de puntería.
“En primer lugar, se guía por un mapa digital del terreno [creado digitalizando fuentes cartográficas]. Incluye un altímetro que mide y compara los datos: los reales y los almacenados en el ordenador. El segundo: el sistema de navegación por satélite GPS. El tercer sistema, [que se está implementando activamente], es la imagen de video. También identifica la imagen real con la del ordenador”, detalló.
En general, prosiguió, gracias a la utilización simultánea de los tres sistemas de guiado, la nueva modificación alcanza una gran eficacia: precisión, fiabilidad y su fuerte protección contra los sistemas de guerra electrónica.
Sin embargo, su uso no demostró ser suficientemente eficaz en Siria porque incluso las últimas modificaciones no siempre les permiten eludir la interceptación, señaló Knútov.
La situación tiene de fondo el hecho de que el Ejército estadounidense lanzara 59 Tomahawk contra un aeródromo militar en la provincia siria de Homs en 2017 por orden del entonces presidente Donald Trump. Pero solo 23 misiles alcanzaron la base aérea siria, y hasta la fecha se desconoce el lugar de impacto de los 36 misiles de crucero restantes.
Así, la eficacia de combate del ataque masivo estadounidense con Tomahawk contra la base aérea siria es “extremadamente baja”, afirmó el portavoz del Ministerio de Defensa ruso, el general mayor Ígor Konashénkov.
“En términos de maniobrabilidad, no son muy superiores a los antiguos. Gran parte de los Tomahawk fueron derribados o desviados por el sistema de radar de las Fuerzas de Defensa Antiaérea sirias. Esto demuestra que los medios para contrarrestar los Tomahawk siguen existiendo: aunque sus defensas se estén mejorando activamente. Es probable que en la nueva versión del Tomahawk se utilicen más materiales compuestos [invisibles a las ondas de radio y otras formas de radiación electromagnética]”, subrayó Knútov.
A pesar de este factor, en la opinión del analista, los sistemas rusos de misiles antiaéreos, Pantsir-S1 y Tor-M2, son eficaces contra el Tomahawk, así como el sistema de nueva generación S-350 Vityaz, que en EEUU, Turquía y otros países ya fue bautizado como “el asesino de los misiles de crucero”.
Teniendo en cuenta que se destinarán 211.300 millones de yenes (1.600 millones de dólares) a la compra de los Tomahawk, Japón parece estar dispuesto a gastar sus fondos, aumentando el presupuesto militar. Tokio comprará 500 misiles Tomahawk, con un alcance de hasta 2.500 km, a EEUU antes de abril de 2027. Como resultado, las zonas costeras de China estarán en la zona de objetivos potenciales. Así, el Ministerio de Defensa japonés apuntó que está considerando la posibilidad de desplegar misiles hipersónicos tierra-aire estadounidenses en territorio japonés.
“Mientras tanto, se sabe que Japón planeaba desarrollar su propio misil hipersónico para 2035, pero al parecer aún no puede hacerlo. Tampoco puede crear sus propios aviones de quinta generación, por lo que tuvo que comprar cazas F-35 estadounidenses. Para evitar que Tokio malgaste dinero y energía en su propio desarrollo, EEUU les ofreció protección en forma de misiles hipersónicos de fabricación estadounidense”, precisó Knútov.
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