Cerca de un centenar de ataques con drones habrían sido repelidos en Moscú el 9 de mayo, durante las celebraciones del Día de la Victoria, reveló el general mayor de aviación Serguéi Lipovói, presidente de la ONG Oficiales de Rusia. Sin embargo, agrega que esta información no fue confirmada de forma oficial.

“Hubo alrededor de 100 ataques de drones ese día, fueron lanzados tanto desde Ucrania como desde la provincia de Moscú con la esperanza de que alcanzaran la Plaza Roja y causaran algún daño. Una parte de estos drones fueron interceptados y otra, simplemente, destruidos gracias a nuestros medios de defensa aérea y unidades de guerra electrónica”, detalló Lipovói.

El general señaló que en ese ataque se usaron por primera vez drones de diseño estadounidense con un alcance de hasta 800 kilómetros.

“Fueron lanzados desde el territorio de Ucrania. A algunos los derribaron en la provincia de Bélgorod, otros fueron neutralizados en las provincias de Kursk, Vorónezh y Kaluga. Se frustraron prácticamente todos los ataques”, aseveró.

En la noche del 2 al 3 de mayo, dos drones explotaron tras ser interceptados sobre el Kremlin, lo que Rusia definió como intento de matar al presidente, Vladímir Putin. Desde Moscú informaron que el mandatario no se encontraba en el lugar al momento del hecho.

Rusia responsabilizó del ataque a Ucrania que a su vez negó cualquier implicación. En opinión del general Lipovói, esos drones fueron lanzados desde la provincia de Moscú.

“A juzgar por su tamaño y el daño que ocasionaron a algunas instalaciones del palacio del Kremlin, uno era un dron de vigilancia y el otro, de ataque, con cierta cantidad de explosivos. Los dos fueron neutralizados gracias a las acciones de la guardia del Kremlin y el Servicio Federal de Protección”, dijo el oficial.

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